San Bonifacio y su elegancia

San Bonifacio es una elegante ciudad de 20.000 habitantes, encaramada sobre verdes colinas en el extremo oriental de la provincia de Verona, a sólo 15 km de nuestra residencia.

Representa un fascinante híbrido entre historia y presente: allí se respira la Edad Media de los condes de Sambonifacio, de las luchas entre señores y la mística de los conventos religiosos, así como la incesante actividad económica de un país que produce independientemente su cotidiano la vida.

Centro histórico

El asentamiento original se desarrolló alrededor de la colina de La Motta, donde se pueden visitar las ruinas del castillo de Sambonifacio, arrasado por el rival gibelino Ezzelino da Romano en 1243.

El centro histórico de San Bonifacio se desarrolla alrededor de la Catedral, en la Piazza Costituzione, dedicada a Santa Maria Maggiore, construida a principios del siglo XII y reconstruida en 1417. A lo largo de Corso Venezia, la calle principal de la ciudad, hay numerosas tiendas y clubes y es agradable caminar mientras se admira la sucesión de edificios históricos y villas.

Un importante monumento religioso es la abadía de S. Pietro Apostolo, visible a lo largo de la carretera estatal que conecta Verona y Vicenza. Construida por primera vez en el siglo VIII por los monjes benedictinos, la iglesia fue reconstruida posteriormente en los siglos XII y XV.

El campanario de temática gótica sobrevive de la segunda fase. En el interior, dividido por columnas y pilares en tres naves, se ven frescos del siglo XIII, así como la cripta de claro origen románico. La abadía es una de las visitas obligadas de San Bonifacio, parada cultural y espiritual.

Cuadrado de San Bonifacio

Comida vino y entretenimiento

La zona de San Bonifacio adquiere más valor si se piensa en el excelente vino que produce, fruto de las nobles viñas que crecen en sus suaves colinas.

Y durante los días más calurosos puede refrescarse y relajarse en el Antiche Terme di Giunone: la leyenda transmitida la fama de las aguas termales de Caldiero, ya conocidas en la remota antigüedad romana. Las «Aguas de la Belleza», así llamadas por los romanos, fueron utilizadas con fines terapéuticos en tiempos muy antiguos, se asume desde los tiempos de los «Paleoveneti».

Ahora el complejo alberga un gran parque con plantas centenarias, piscinas de olas con juegos de agua, toboganes y aguas termales terapéuticas.

¡Para más información o para reservar su estadía contáctenos ahora!

[email protected]